«Por simple observación se puede constatar la ley de ciclos (de ida y retorno ininterrumpida), que se manifiesta en todo fenómeno de la naturaleza y el cosmos. Cada pensamiento generado, cada palabra pronunciada y cada acto realizado, vuelven sobre sí y por lo tanto cada evento que llevamos a cabo en el presente determina el futuro venidero. Así que eres tú quien determina tu destino».